The Sandman, o de cómo una historieta puede volarte los sesos

MADE IN CHAGO CITY

Por: Rugdel Medina

Esta reseña se la pedí (exigí, chantejeé) a mi amigo Rugdel Medina Rodríguez, porque si bien a mí The Sandman me parece la cosa más genial que se ha escrito en formato comic en este universo y en varios otros, su punto de vista iba a ser mucho más imparcial y, por consiguiente, correcto. No quita que más adelante me dé por comentarles mi criterio de fanática desbocada con un amor platónico por Neil Gaiman, pero eso no será ahora.

Allá por los años 40 un hombre paseaba por el universo de DC con una máscara de gas mientras ponía a dormir a los malhechores de turno. La historia era un bodrio y Sandman (Hombre de Arena) —así le decían al superhéroe— fue a parar al baúl de los personajes olvidados con los que nadie quiere meterse.

O casi nadie. A principios de los 90…

Ver la entrada original 571 palabras más

2 comentarios sobre “The Sandman, o de cómo una historieta puede volarte los sesos

Deja un comentario